La circularidad en los modelos de pago por uso.
Los patrones de producción y consumo en masa están en el centro de los desafíos medioambientales actuales. La típica mentalidad de «extraer, producir, usar y tirar» no está ayudando a que los fabricantes se esfuercen por crear productos más sostenibles. Al contrario, esta mentalidad fomenta el uso excesivo de recursos y el aumento desenfrenado de las ventas. Sin embargo, no todo está perdido, ya que la economía circular y los modelos de negocio circulares emergen como soluciones clave.
¿Has oído hablar de los modelos de «pago-por-uso» o «product-as-a-service» (PaaS)? Son la alternativa ideal a la compra tradicional. Imagínate poder disfrutar de todas las funcionalidades de un producto sin necesidad de ser el dueño absoluto. ¿Cómo es posible? Bueno, mediante el alquiler, el renting, las suscripciones o incluso las pruebas antes de compra. Es como tener acceso VIP a un producto sin tener que preocuparte por su propiedad.
Cuando un cliente elige adquirir un producto como servicio, establece un acuerdo con la empresa proveedora. En lugar de comprar el producto en sí, el cliente paga por el acceso al servicio durante un período de tiempo específico. Al finalizar dicho período o cuando el cliente deja de utilizar el producto, este se devuelve al proveedor para continuar su ciclo de vida.
Este enfoque responde a las necesidades reales de los consumidores, quienes no siempre desean ser dueños de los productos, sino beneficiarse de su uso. Además, motiva a los fabricantes a ser responsables no solo en la calidad de sus productos desde el diseño, ¡sino también en su mantenimiento a lo largo del tiempo!
Newe y la democratización de consumo responsable.
Pablo y Ramón fueron pioneros en España al detectar esta tendencia en el mercado. Resulta que cualquier negocio podría ofrecer este tipo de modelos, ¿verdad? Pero aquí viene el giro inesperado: la integración de estas modalidades en la operativa diaria de venta y en los sistemas de gestión internos es un camino largo y costoso. La logística, el almacenamiento, los seguros y hasta la forma de relacionarse con el cliente cambian por completo en comparación con los modelos tradicionales. No es de extrañar que muchos se lo piensen dos veces antes de probar suerte.
NEWE nace para solucionar este problema al ofrecer a los fabricantes y distribuidores una salida alternativa a sus productos basada en la rotación y en la optimización de su vida útil a lo largo del tiempo. Con su software innovador, permite integrar de manera rápida y sencilla las opciones de alquiler, suscripción, renting o prueba antes de compra tanto en la web como en el back office de sus clientes. Es una herramienta que transforma a cualquier fabricante o distribuidor con tienda en línea en un experto en modelos circulares. Sin complicaciones, sin fricciones, tanto para el fabricante como para el consumidor.
Pero ¿qué ocurre cuando alquilamos un producto en lugar de comprarlo? ¿Cuál es el impacto sobre el planeta? En primer lugar, con la rotación de productos entre consumidores evitamos la producción de nuevas unidades para su consumo, con las emisiones de CO2 asociadas a este proceso. Por otro lado, todos los productos que dejamos de utilizar acaban convirtiéndose en residuos, que en la mayoría de los casos terminan en vertederos al no ser reciclados correctamente. Cuando escogemos alquilar, no solo alargamos la vida útil de estos productos, sino que compartimos la corresponsabilidad con el fabricante de garantizar una segunda vida para ellos sin poner en peligro el futuro del planeta.
Una nueva tendencia al alza.
La buena tracción de NEWE demuestra que cada vez son más las personas comprometidas a buscar una forma más inteligente y consciente de consumir. Desde sus inicios en 2020, la compañía ha visto crecer sin freno sus ingresos y el número de transacciones en su plataforma. La otra cara de la moneda son todos los retailers que se suman cada mes a su cartera de clientes, permitiendo que ya podamos alquilar desde un móvil, a un ordenador, una lavadora o incluso un traje de forma sencilla y con todas las garantías de tus marcas favoritas.
Un proyecto que viene a aportar valor y a arrojar una nueva perspectiva sobre los modelos de economía circular. Desde el Fondo Bolsa Social compartimos la visión de Pablo y de Ramón de que la tecnología debe servir como habilitador para fomentar unas dinámicas de producción y de consumo más sostenibles y estamos felices de poder acompáñalos en este viaje.
Recuerda, si estás en el dilema de comprar o alquilar, piensa bien: ¿Quieres una relación comprometida con ese producto o prefieres tener un ‘affair’ sin ataduras? ¡La decisión es tuya, pero al menos el alquiler no te dejará con corazones rotos ni espacios abarrotados de trastos!
